A veces pareciera que la vida es intensamente aburrida, o mi mente colapsa en ideas repetitivas. Mi vida se confunde, entre sueños credos que no son míos. Si me arrepiento de lo que hago, sabré que he perdido. Pero a la distancia se que todo lo que hago son consecuencias de las decisiones que un día tome.
Con el tiempo también he aprendido, a que mis palabras no tienen sentido, si no le hago caso a este dolor. Tan emocional, tan ridículo y tan sentimental.
No importa si llore un mar o solo sea una simple lágrima. El dolor es el mismo..